La semana pasada se publicó una catarata de datos relacionados con el mercado laboral: “JOLTS”, “ADP Employment Report”, “Jobless Claims” y “Employment Situation”, siendo este último el más importante. Del mismo se desprende que los Nonfarm Payrolls (nóminas salariales excluyendo a los sectores del campo) aumentaron en 336.000, más que duplicando al consenso de 160.000, reforzando el concepto de resiliencia del mercado laboral.
Sin embargo, el “average hourly earnings Y/Y” aumentó ligeramente por debajo de las expectativas (4,2% vs. 4,3%). La mayor preocupación del FOMC con respecto a la inflación “core” es la generada por los servicios mano de obra intensivos. Por lo tanto, constituye una buena noticia que se observe una desaceleración en el indicador señalado.
Con respecto al calendario económico, la noticia económica más relevante para monitorear esta semana será la publicación del IPC, para el cual se espera según el consenso de expectativas, un crecimiento interanual del 4,1% para la definición “core”, lo que representaría una desaceleración con respecto a la lectura anterior.
De acuerdo al Fed Watch Tool del CME, no hubo cambios significativos en las expectativas de tasas durante la semana pasada.
Como comentamos la semana pasada, aún en un clima de tendencia alcista de las tasas largas, no descartamos una corrección al menos temporal, como ya se ha observado entre fines de la semana pasada y comienzos de la presente.
La resiliencia del mercado laboral, combinada con señales de desaceleración del costo laboral, aumentan la probabilidad de finalización del “pull back”, coincidiendo con la típica estacionalidad constructiva del último trimestre del año.