Como hemos comentado en reportes anteriores, la rápida acción de la Reserva Federal, junto al Departamento del Tesoro y al FDIC, siguiendo las recomendaciones de los premios Nóbel de Economía de 2022, Bernanke, Diamond y Dybvig, parece haber disipado el escalamiento de las tensiones financieras.
El influyente James Bullard, titular de la Reserva Federal de “St. Louis” ha declarado hace muy pocos días que es altamente probable que las tensiones financieras continúen disminuyendo, por lo que la Reserva Federal debería
continuar con el endurecimiento monetario en la medida que el mercado laboral se mantenga fuerte.
Bullard remarcó que «tenemos un largo camino por recorrer y creo que va a ser difícil hacer que la inflación vuelva a bajar al objetivo del 2%… así que vamos a tener que mantenernos en eso», además comentó que elevó en un cuarto de punto su estimación de a cuánto debe aumentar la tasa de interés de referencia de la Fed para fines de 2023, llegando la misma a un rango de 5,50% – 5,75%.
De acuerdo al Fed Watch Tool del Chicago Mercantile Exchange, el mercado parece hacerse eco de las declaraciones de Bullard y ha aumentado la probabilidad del escenario en el cual el FOMC eleve a la tasa de política monetaria en 25 puntos básicos en su próxima reunión que tendrá lugar el 3 de mayo.
Por su parte, el ex secretario del Tesoro, Lawrence Summers, expresó que está bastante claro que estamos en la etapa final del ciclo de subas de la tasa de política monetaria. Comentó también que la probabilidad de una recesión está aumentando, lo cual ha quedado en evidencia con la publicación de los últimos índices de los gerentes de compra.
Summers sigue siendo muy crítico con el trabajo de la FED, a su juicio deberían revisar los modelos que aplican, dado el sobrecalentamiento que han generado.