El mercado sigue atento a las negociaciones con el FMI, entre ayer y hoy operaron vencimientos por USD 2.700 MM y la Argentina hoy no dispone de los dólares para hacer frente a ese pago. Podría como muestra de buena voluntad realizar un pago parcial utilizando aproximadamente unos USD 1.900 MM (utilizando cerca de USD 1.600 MM en concepto de DEGs y algo de reservas propias). El problema que surge aquí es que los tiempos se acortan: Argentina tiene hasta fines de junio para regularizar su situación y la reunión del fondo es recién el 7 de julio. Y aquí entramos en una referencia circular, si Argentina no paga lo vencido no podría acceder a nuevos desembolsos, pero estos -de ocurrir- serían después de la reunión del organismo.
En el frente político este sábado a media noche opera el plazo para la presentación de las candidaturas a las PASO; algo que el FMI viene monitoreando de cerca. Sobre todo el rol que podría llegar a tener el ministro Massa dentro de las mismas. Al momento han quedado bastante delineadas las candidaturas de Juntos por el Cambio, La Libertad Avanza, pero resta aún conocer el desenlace de la saga del Frente de Todos (rebautizado ahora como Unión por la Patria como una manera de desligar la marca FdT a la paupérrima situación macroeconómica y social que deja el gobierno actual (más allá de su impericia e ineficacia uno no debe dejar de incluir en la evaluación la inusitada sucesión de shocks externos a los que debió enfrentarse la actual administración: una pandemia, el conflicto entre Rusia y Ucrania que disparó los precios de la energía, una suba de tasas internacionales en tiempo récord y la peor sequía en 90 años).
Los mercados locales tanto de renta variable como de renta fija se van posicionando claramente con una mirada puesta ya en el recambio. El rally que vienen experimentando las acciones argentinas (el S&P Merval medido en términos de CCL y ajustado por inflación de EE.UU. cerró ayer a USD 845, el máximo de toda la gestión de Alberto Fernández y 60% por debajo de los máximos alcanzados durante el 2018, USD 2.152).
Por su parte los bonos soberanos (especialmente los bonares) también registraron una notable performance incrementándose casi un 5% durante la semana. Así el spread entre el AL30 y el GD30 se redujo durante la semana a un 22,7%, casi 700 bps (siendo su promedio histórico 11,5% y su máximo 31,5%).