Dado que las acciones en pesos han sido utilizadas como vehículo de cobertura cambiaria, el ajuste actual podría ser interpretado como una oportunidad de compra, contemplando el panorama inflacionario y cambiario que se espera.
El mercado de acciones argentinas se encuentra transitando un proceso de ajuste. Tras una serie de retrocesos del 30% del S&P Merval después de las elecciones, los valores empezaron a recuperarse el martes. Todo tiene explicación.
Dado que las acciones en pesos han sido utilizadas como vehículo de cobertura cambiaria, el ajuste de ventas que se extendió hasta el lunes, podría ser interpretado como una oportunidad de compra, contemplando el panorama inflacionario y cambiario que se espera.
Sin embargo, los analistas se muestran cautelosos y selectivos de corto plazo dada la incertidumbre política.
El S&P Merval llegó a caer 30%, algunas acciones que bajan más. En particular, las que mayores pérdidas exhibieron son las que habían funcionado como cobertura cambiaria en la previa electoral.
Las acciones en pesos funcionaron a lo largo de este año como un vehículo como cobertura cambiaria y/o inflacionaria, ya que el índice local le ganó al dólar y a la inflación a lo largo del 2023.
Sin embargo, dado que es casi con seguridad que veremos una economía con una nominalidad más acelerada, la caída actual de las acciones en pesos que empezó a revertirse el martes podría ser vista como una oportunidad de compra, dentro de una estrategia de búsqueda de cobertura cambiaria e inflacionaria.
Debido a que el contexto electoral se muestra incierto y sin una definición, el consenso entre los analistas es de mantenerse con cautela ya que todo está abierto.
De hecho, la cautela entre los analistas se refuerza cuando se ve un aumento en la volatilidad en las acciones argentinas en dólares.
Diego Martínez Burzaco, head de estrategia de Inviu, explicó que detrás de la baja en las acciones se había dado el fenómeno de menos demanda por cobertura cambiaria a causa de una la descompresión de tipo de cambio producto de una merma en las expectativas de dolarización.
«Al disiparse un poco la probabilidad de dolarización, hubo una descompresión generalizada«, comentó.
Hacia adelante, Martínez Burzaco se muestra con cierta cautela.
«Creo que en este momento de mercado sería muy selectivo. La situación está muy incierta. Muchas empresas habían crecido por encima de lo que es la realidad de la macroeconomía argentina. Es incierto en cuanto a cuales van a ser los sectores ganadores o perdedores en función de cómo resulte el balotaje«, afirmó.
Por su parte, Ignacio Sniechowski, head de research de Grupo IEB, cree que la baja todavía tiene recorrido, aunque dependerá del factor electoral más que nunca.
«Si tomamos el 20% de premio por sobre los niveles de riesgo país que vienen convalidando los inversores como piso; hoy eso se traduce en un piso para el S&P Merval de 630 puntos. La dirección que tome el mercado de acciones responderá a como vengan posicionándose los candidatos y si el favorito comienza a ser Milei podríamos volver a ver una nueva búsqueda de cobertura de cara a la segunda vuelta«, detalló.
Para Sniechowksi, un factor que puede salvar a las acciones argentinas es el cepo y la falta de activos para indexar los pesos a instrumentos que logren cobertura inflacionaria y cambiaria.
«Del grado de encepamiento que tiene la economía argentina hay un piso defensivo para el mercado de equity. Muchas tesorerías destinan algún porcentaje de sus carteras al mercado dada la limitada oferta de instrumentos y la necesidad de diversificar riesgos«, dijo.
Medido en dólares, el S&P Merval también se encuentra dentro de un proceso de ajuste.
El máximo previo a las elecciones había sido de u$s 879, mientras que actualmente cotiza en u$s 669, lo cual implica una merma del 23% desde entonces.
Allí, el mercado también se muestra con cautela de corto plazo, aunque con chances de ver un rebote luego de semejante caída.
Maximiliano Bagilet, team líder de TSA Bursátil, considera que el S&P Merval en dólares se encuentra en un nivel de contención cercano a los u$s 600 y espera que se dé un rebote desde estos niveles.
En cuanto a las oportunidades, el especialista de TSA Bursátil afirmó que desde la compañía se muestran muy selectivos en cuanto a la selección de los papeles ya que entiende que todas las acciones están expuestas a un cambio completamente binario.
«El escenario es binario en este momento, por más que los 2 postulantes están suavizando sus posturas. La caída del S&P Merval perforó los 700 dólares, lo cual es una muestra más de que el mercado está depurando toda la suba que tuvo previo a las expectativas electorales«, comentó.
Los papeles puntuales que señaló Bagilet son Ternium Argentina, YPF, TGS y Edenor.
Finalmente, José Ignacio Thome, analista sr de acciones de Grupo SBS, se muestra selectivo.
«Hacia adelante, y partiendo de estos precios, somos constructivos de mediano plazo manteniendo el sesgo hacia el sector energético que sin dudas será una de las claves para el éxito del plan que cualquiera de los dos candidatos planee ejecutar en su primer año de gobierno«, afirmó Thome.